Decoración, literatura y restauración
IDEA 1 -DECORACIÓN-
La primera entrada para inaugurar este blog la quiero dedicar a Mile Jardín Hogar, un comercio de Alcañiz que todos conocemos y que lleva abierto más de 40 años. En sus inicios fue un bazar donde se vendía un poco de todo pero en 2005 se decidió hacer una gran reforma apostando por vender y ofrecer solo calidad. Cuando Leonor Estopiñan se jubiló fue Cristina Llombart, su hija quién tomó el relevo. En la actualidad Cristina, es la persona quién con su dilatada experiencia en flores, menaje y decoración asesora y atiende a todo aquél que lo necesite.
La pieza que ha elegido Cristina Llombart para este post es la mesa de estilo industrial de Foimpex. La combinación de madera y forja aporta calidez y robustez a partes iguales. El color verde tan actual este 2019 le da ese toque distinto con cierto aire vintage que enamora a simple vista. Sin duda, una de las pieza clave esta temporada en Mile.
El objeto de Mile que para mí es más especial por su sencillez y por los recuerdos que me evoca cuando la miro, es la escalera de madera vintage de Imori. Hoy sirve de adorno y soporte para plantas y flores pero en su día fue un elemento indispensable para nuestros antepasados. Esa capacidad de dar otra oportunidad a artículos en desuso y convertirlos en tendencia es lo que me encanta de marcas como Imori y otras que podemos encontrar en Mile.
IDEA 2 -LITERATURA-
Continuamos con el que para mí es el espacio en el que podría pasar más tiempo en Alcañíz (sin contar los bares, claro), la librería Santos Ochoa. Su olor, y todos los tesoros que esconde hacen de ella un lugar perfecto para escapar y evadirse del día a día.
Cuando hablé con Eugenio, el propietario y le conté mi idea acerca de lo que quería que fuese este blog, no dudó ni un instante en colaborar conmigo. Le pedí que me explicase un poco quién era y por qué decidió montar la librería, y esto fue lo que me escribió. (Podría haberlo transcrito pero seguro que hubiese destrozado una narración tan precisa, así que ahí van sus palabras):
“Me llamo Eugenio Ramo y, aunque nací en Zaragoza, he vivido en Alcañiz hasta el año 2000, año en el que terminé bachillerato y me fui a Barcelona para estudiar Filosofía. Posteriormente cursé estudios de Biblioteconomía y Filología Hispánica en la misma ciudad hasta 2013. Fue entonces cuando regresé a Alcañiz para abrir la librería Santos Ochoa. Más allá del componente vocacional también fue una idea loca, mi parte inconsciente y testaruda me empujó a llevarla a cabo en plena crisis. La librería va camino de cumplir su sexto aniversario y soy feliz haciendo mi trabajo.
Elegir un solo libro es muy complicado, así que he escogido uno que leí recientemente y que desde que lo terminé me acompaña un estado de ánimo imposible de abandonar, no sabría muy bien definir la sensación, quizás la palabra adecuada sea incertidumbre. Se trata, curiosamente, de un cómic. Y es que por primera vez en la historia del Man Booker Prize, uno de los premios más prestigiosos para escritores en lengua inglesa (y que han ganado autores del nivel de Julian Barnes, Margaret Atwood o Coetzee), había un cómic entre sus nominados (finalmente lo ganó la irlandesa Anna Burns con su novela Milkman, que acaba de publicar Alianza). Esa anécdota sirvió para que me acercara al libro y abandonara mi género predilecto, la narrativa. Estoy hablando de Sabrina, de Nick Drnaso (Illinois, 1989). El personaje que da título a la obra desaparece misteriosamente en las primeras páginas y el lector se convierte en un voyeur que observa el sufrimiento de sus seres queridos y su entorno. El estilo es sencillo, plano, frío e inocente, Drnaso utiliza de forma magistral los silencios para introducirnos en los ambientes y nos habla de nuestra sociedad, la actual, de lo hiperconectados que estamos, de la desinformación que a su vez produce ese exceso de comunicación virtual, de la soledad, la violencia o las conspiraciones. Sabrina bien podría ser un capítulo de Black Mirror de corte existencialista y profundamente pesimista o citando a Catalina Mejía, su editora española en Salamandra Graphics, “una radiografía de nuestro tiempo”. Aún con todo su lectura es un verdadero placer y, sin duda, su nominación al Man Booker no fue casualidad, la narración es impecable.”
Después de las palabras escritas por Eugenio me toca a mí recomendar un libro. (¡Ahí es nada…!)
He estado dudando entre varios títulos pero finalmente me he decidido por Llámame por tu nombre de André Aciman, (Alfaguara 2007) porque es un tres en uno.
Un tres en uno porque, tanto la película, la banda sonora como la novela son de lo mejor y más bonito que a mi parecer se ha creado en mucho tiempo. La película ganadora de un Oscar y un Bafta a mejor guión adaptado (Obra de James Ivory y por lo que conocí el libro) se estrenó en 2017 y fue dirigida por Luca Guadagnino (otro genio). La banda sonora, obra de Sufjan Stevens y en especial la canción “Mistery of love” es preciosa, convirtiéndose incluso en la tercera protagonista de esta peli, además desde que la escuché se ha convertido en una de mis favoritas. (Raro es el día que no la escucho).
Y por supuesto la novela, ¡Qué gusto para los sentidos leer cada línea e imaginar (no sin envidia) la bella historia que vivieron los protagonistas!. Ésta narra el romance entre Oliver, un profesor estadounidense de 24 años y Elío un joven italiano de 17 durante el verano de 1983 en un pueblo al norte de Italia. El amor, la pasión, el deseo o el miedo son algunos de los sentimientos que describe fabulosamente André Aciman, en una que es, de las historias de amor más hermosas que he leído en mucho tiempo.
IDEA 3 -GASTRONOMÍA-
Seguimos con otra sugerencia esta vez gastronómica. Para ello hemos estado en la Casa de Viajeros y restaurante “La Tellería” situada en Valjunquera. Juana Ruiz abrió este establecimiento en 1993 y fue de los primeros lugares donde poder alojarse en el pueblo. Antiguamente fue un molino de aceite y una fábrica de tejas, (de ahí su nombre) pero en la actualidad dispone de 6 acogedoras habitaciones y un restaurante. Desde 2010 lo gestiona su hija Eva Celada, una apasionada de la cocina y la fotografía cosa que se nota en cada elaboración que crea en el restaurante. Para que os hagáis una idea, tiene una calificación de 8.2 en ebooking.
Eva nos recomienda brandada de bacalao sobre salmorejo cordobés y aderezado con migas de paté de tomate. Es una fusión rompedora y novedosa de dos platos procedentes de puntos muy distintos de nuestra geografía (el sur y el norte) pero tratados con un mimo espectacular. Todo ello además con un diseño y un emplate como solo ella sabe hacer.
Mi plato favorito de “La Tellería” es el helado de frambuesa. Yo no soy muy de postres por eso cuando probé este….¡me enamoré! El color, la textura super cremosa y el intenso sabor lo convierten en un postre para perder los sentidos. Eva me ha chivado que le añade un poco de grosella y unas gotas de Enate rosado….las fotos lo dicen todo.
Y aquí se acaban las ideas de esta semana, espero que os haya gustado todo tanto como a mí. Saludos.